CARTA AL "MENISTRO" DE CATALUÑA.

Aún a día de hoy hay quienes se creen con el derecho de decirnos  lo que podemos hacer o no hacer, o lo que podemos tener o no tener, en definitiva, qué camino debemos tomar y qué debemos esperar del futuro. Los que ahora hablan en alto ante los medios antes hablaban en susurros en El Pardo, porque aunque nieguen la mayor, siempre eran bien recibidos y bien tratados por su Excelencia el Generalísimo. Sin duda los extremeños hemos ganado algo con el cambio, pues lo que antes conseguían estos acaparadores con una simple insinuación ahora necesitan el doble de esfuerzo y al menos una minoría parlamentaria del gobierno de turno para salirse con la suya. La última estupidez del Govern de la Generalitat ha sido pedirle al Gobierno de Madrid  que deje aparcado el proyecto del AVE de Extremadura para poder reducir el déficit del Estado. ¿No habrá otras partidas presupuestarias que sean más prescindibles e igual de onerosas, pero menos importantes que este proyecto? Seguro que hay por ahí alguna inversión del Estado en territorio catalán -más cercano a las compentencias del Govern- al que seguro le podremos aplicar un buen tijeretazo.

Yo creo que el problema está en el desconocimiento. Estoy seguro que desde Cataluña se piensan que aquí seguimos con la burra atada a la puerta de casa y que en los pueblos siguen mandando el alcalde, el cura y el boticario, y todos ellos actuando bajo los deseos del latifundista de turno al que poco podía importarle el futuro de esta tierra porque no vivía en ella, y que luego negociaba en privado con empresarios del norte para venderles sus productos. Con esta visión de Extremadura, ¿no es lógico que piensen que cada euro invertido aquí no es otra cosa que una limosna? Una limosna de la que se creen dueños y que nos la dan como quien la da una moneda a un mendigo a la salida de misa y le impones una sola condición: "No te la gastes en vino".


Para evitar que el Gobierno Catalán continúe en este error, he decidido escribir a D. Andreu Mas-Colell -Conseller de Economía de la Generalitat-, que ha sido el último en abrir la boca, explicándole lo que pensamos los extremeños de todo esto. A pesar de nuestro escaso bagaje cultural, intentaré escribir lo mejor que pueda, pero ya se sabe el handicap que supone para nosotros la lengua. La carta es la siguiente:






Extremadura a tantos, de tantos, de taitantos. (Perdidos en el espacio y en el tiempo)


Señó Menistro de Cataluña:

Estos días no ablamo d´otra cosa en el pueblo. Nos hemos enterao c´allí en Cataluña no quieren que nos pongan el tren y como usté comprenderá andamo un poco preocupao porque nos han dicho que tien ustedes mucha enfluencia en el gobierno de Madrid y ca´lomejón l´hacen caso. Don Guillermo, el alcalde (presidente), nos reunió a tos en el ayuntamiento (asamblea) y nos contó qu´iban a dir a Madrid, él y otros mandases de por aquí, p´hablar con el menistro de allí y pedirle que no les hagan caso a ustedes y que nos pongan el tren. Supongo que se llevarán algunas viandas pa quedá bien con sus señorías, pos ya sabemos lo que gustan a los de Madrid las cosas que comemos aquí.

D. Arturo, el amo las tierras, dice ca´el le da iguá, que mientras le paguen bien la cebá luego no le importa cómo se lo lleben, pero mi chico, qu´es mu espabilao, me dice que es mu´importante que pongan ese tren porque servirá pa traer posperidá y dineros, cosa c´aquí hace mucha falta. A D. Arturo no l´ago mucho caso porque sé ca´el lo que le importa es lo suyo, pero si mi muchacho dice que hay que pedirlo seguro que tiene razón porque, bruto será como su padre, pero ya m´ha dicho el señó maestro que intente darle escuela porque vale pa los libros. Ya veremos qué podemos hacer, porque aunque nos den una de esas becas que dicen que puede pidir to el mundo, antoavía hay que´charle más perras pa que pueda estudiar fuera del pueblo, y eso que ya se pué estudiar en la capital de aquí, porque cuando yo era un zagal había que dirse más lejos. (Ya me gustaría ganar lo que se gana en Cataluña y que mi hijo no tenga problema para trabajar luego en su tierra).


Mire usté señó menistro, usté habla mucho de reducir el dífici (ma´dicho mi hijo que eso quiere decir gastar poco) y a mí me paece que no puede pedir al presidente de España que no nos haga el tren porque vale muchas perras, cuando ustedes se emborricaron en meter el suyo hasta el mismo centro de Barcelona a pesar de que se se les jundía el terreno por toas partes y tenían asustá a toa la gente porque creían que se les caía las casas. ¿Cuánto dinero costó ese tren señó menistro? Además, me´nterao que ustedes ahorrar, lo que se dice ahorrar más bien ná de ná. C´an superao en muchos dineros lo que en Madrid les avían dicho que se podían gastar y ahora resulta que se lo quieren ahorrar, por ejemplo, quitando cosas de la  iguala de los médicos  y echando gente de las que trabajan pa ustedes. Como antoavía les debe faltar más perras s´han acordao de nosotros y han pensao que pa qué queremos nosotros un tren, si eso no vale pa las tareas del campo. 

Ahora resulta que Portugal ha cambiado de presidente y a este paece que tampoco le gusta el tren ni lo quiere en su tierra, y lla están diciendo muchos que pa qué se va a hacer. Cuando hicieron el tren pa Cataluña, ¿lo habían pedido los franchutes?; cuando se ha hecho pa Valencia, ¿van a seguir pa´lante hasta Mallorca? Ademá el nuestro será mejón que el suyo porque, aunque vayamos una miaja más despacio, podemos llevar mercancías en trenes más modernos y más rápidos. Vendrá muy bien pa una plataforma de mercancías (mi muchacho me dice que se llama lojística) que van a hacer en Badajoz, y cuando Portugal quiera acabar el suyo, estaremos más cerca de un puerto de mar.

Si el año que viene sale D. Mariano de presidente a lo mejón podrán hacer eso que quieren hacer ustedes. Sí hombre, eso de cobrar la consulta del médico y quitar becas pa estudiar a la gente necesitá  -que semos muchos- y asín tener más dinero pa lo que ustedes quieran. Podían  preguntá en la Comunidá de Madrid, que me paece que también están por la labor. Pero le digo una cosa Sr. menistro, luego no se enfaden si la gente les acampa enmedio los parques protestando porque no tienen ni trabajo, ni estudios, ni medecina.

No quiero "robarle" más tiempo a su señoría asínque me despido no sin antes mostrarle el cartel que vamos a colocá na más entrá en Extremadura pa que sepa usté y tos sus compinches lo que pensamos  nosotros de su Govern y de sus prioridades.